El esposo regresa de misa, entra a la casa corriendo y se dirige a la esposa.
Con una gran sonrisa la abraza, la levanta tiernamente en sus brazos y danza con ella en el aire alrededor de todos los muebles de la casa.
-¿Pero qué es lo que dijo el Padre en el sermón?, le pregunta ella al esposo.
-¿Dijo que los esposos tenían que ser más cariñosos con sus esposas?
-No- contesta el esposo-
-El Padre dijo que teníamos que cargar nuestras penas con alegría y júbilo