Pasa una mujer por la
calle contorneándose muy sensual y provocadoramente...
y un albañil, desde un andamio le empieza a gritar:
- Bizcochito!
- Puín de chocolate!
- Caramelito!
- Bombón!
- Turroncito de azúcar!
- Chocolatito con nueces!
- Manjer de leche!
- Flancito de caramelo!
- Coquito de almíbar!
El albañil, al ver que la mujer le lanza una mirada de absoluto desprecio
en vez de una sonrisa, le grita:
- "¡Todo eso es lo que tienes que dejar de comer, gorda de mierda!"