Un individuo va conduciendo su automóvil por una carretera y empieza a anochecer.
El hombre se da cuenta que su vehículo era el único en la carretera y empieza a preocuparse..
- ¡Mierda! Estoy solo en este camino y está anocheciendo...
Caramba, en los caminos solitarios aparecen los marcianos. . .
Sobre todo cuando es de noche . . .
¡Oh! Está llegando una niebla terrible!. . .
¿Que haría si me encuentro con un OVNI?. . .
¿Huir o enfrentarme?. . .
¡No, si huyo me disparan con su pistola Laser!
Y así iba el hombre cada vez más y más preocupado, en eso sube una pequeña colina y al descender ve en la carretera algo que parecía un OVNI. . .un montón de luces amarillas, rojas y anaranjadas que parpadeaban y entre la niebla daban un espectáculo aterrador.
- ¡Mierda! Un OVNI, ¿Qué carajo hago ahora? Mejor me detengo y me presento a ellos. . .
Detiene su vehículo y camina hacia las luces, al acercarse distingue una silueta semi humana, de unos 90 centímetros de estatura, los brazos le llegaban hasta el suelo y de atrás le salía una cola
- ¡Buenas noches, soy Pepe Pérez piloto del coche y vengo en son de paz. . .!
Y el Marciano le responde:
- ¡Y yo soy Juan , chofer del camión y estoy cagando!