En la ciudad había un restaurante cuyo menú era muy famoso por sus platillos exóticos.
Don Segismundo decide probar y va al restaurante.
- Buenas tardes señor, ¿En qué podemos servirlo? Pregunta el mesero
- ¿Cuál es la especialidad de la casa? Pregunta el cliente.
- Pues verá, hoy tenemos criadillas a la parrilla
- ¿Criadillas? ¿Qué es eso?
- Son los testículos del toro de la corrida de ayer, no solamente son muy sabrosas sinó una excelente fuente de vitaminas y muy vigorizantes.
- Pues tráigame las criadillas!
Terminado el almuerzo el cliente queda muy satisfecho, un plato delicioso y abundante.
A la semana siguiente el cliente regresa y pide las criadillas a la parrilla.
- Oiga! Reclama el cliente muy airado, la semana pasada fue un plato abundante y ahora es muy pequeño ¿Porqué la diferencia?
- Señor, es que a veces gana el torero y a veces el toro
