Pancho tenía su tienda de animalitos (mascotas, para los turistas) y llega hasta ella un turista..
- Buen día señog, dice el recién llegado
- Buenos días, responde Pancho, ¿En qué puedo servirlo?
- Mi quegeg compgag un logo..
- ¿Un qué?
- Un logo, esos animalitos con plumas de cologes y que hablan "logito quiege una galleta"
- ¡Ah, un loro!
- Si, si, mi quiege un logo que habla
- Vea señor, lo siento mucho pero vendí el último que nos quedaba
- ¡Cagamba, que contgagiedad, yo ofgeceg un logo a mi esposa y estoy dispuesto a pagag 500 Dólages!
La esposa de Pancho que estaba escuchando la conversación, lo llama...
- Pancho, ven un momento
- ¿Si querida?
- Si ese turista quiere pagar 500 Dólares, dale éste buho chiquito y dile que cuando crezca aprenderá a hablar...total no se dará cuenta y nunca más volverá por acá.
Y sale Pancho con el pequeño buho..
- ¡Qué suerte tiene señor, acá tengo un lorito pequeño y cuando crezca usted le puede enseñar a hablar...
Y negocio hecho...
Al año siguiente durante la festividad del pueblo, estaba allí, ¡el turista!
Pancho lo ve acercarse y trata de esconderse pero no pudo..
- Buen día señog
- E-e-e buen día, ¿Qué desea?
- ¿Se acuegda que el año pasado me vendió un logito?
- S-si señor, ¿y ya aprendió a hablar?
- No, aún no, ¡pego hay que veg la atención que pgesta!
Gracias a Jorge