Una pareja cumple sus Bodas de Plata matrimoniales (25 años), era la pareja ideal, vivían en una hermosa casa en un barrio residencial y tenían 3 hermosos niños.
Su vida matrimonial siempre fue idílica, cada encuentro sexual era mejor que el anterior, la esposa siempre estaba satisfecha, feliz y muy enamorada de su esposo.
En las reuniones con las amigas siempre comentaba que su esposo era un amante fantástico, que la hacía delirar de dicha y tenía cinco o más orgasmos en cada encuentro sexual. Era la envidia de sus amigas.
Solamente había un detalle que siempre le intrigaba, cada vez que tenían sexo el quería oscuridad total, cerraba las cortinas de la habitación, apagaba todas las luces y hasta cubría las ranuras de la puerta para que no entre luz.
Una noche en medio del delirio sexual y en un descuido del esposo, ella enciende la luz de la lámpara de la mesa de noche y descubre horrorizada que su esposo usaba una prótesis pues no tenía pene.
El delirio se convirtió en ira, furia y odio.
- ¿Cómo es posible miserable, mal nacido, hijo de perra, cobarde, eunuco que me hayas hecho esto toda la vida? Me has engañado, te has burlado de mí, has jugado con mis sentimientos, con mi sexualidad, ¿qué dirán mis amigas cuando se enteren?...
- Un momento querida, dice el esposo, yo te puedo explicar esto
Pero tú me explicas lo de los niños.
