Un Arabe entra a un bar y estaba a punto de pedir un trago cuando vió cerca de la esquina a un tipo vistiendo la ropa tradicional de los Judíos.
No habría que saber mucho para darse cuenta que el individuo en mención era Judio, asi que que Arabe grita en voz muy alta como para que todos escuchen:
No habría que saber mucho para darse cuenta que el individuo en mención era Judio, asi que que Arabe grita en voz muy alta como para que todos escuchen:
- ¡Tragos para todos menos para el Judio de la esquina!
Una vez servidos los tragos el Judio le dice "Gracias"
- Molesto por la actitud del Judio el Arabe grita de nuevo y más fuerte, "les pago un trago a todos menos al Judio"
Nuevamente el Judio le sonríe y le grita ¡Gracias!
- Furioso el Arabe repite la invitación por tercera vez y nuevamente el Judio le da las gracias.
Furioso el Arabe se dirige al barman:
- ¿Qué le pasa a ese tipo? He pagado tres rondas de tragos para todos excepto para él y me agradece y sonrie, ¿Es idiota o que?
No señor, responde el barman
- ¡Es el dueño del bar!
