Se realiza un concurso de mucho
dinero para ver quién aguanta más latigazos, y se presentan un norteamericano,
un africano y un cubano.
Primero pasa el norteamericano:
dos metros de 'Marine' y con una presencia física imponente. Le arrancan la camiseta y le empiezan a dar latigazos. Pasada media hora
el americano dice: 'No more, no more' (no más, no más).
Y la afición norteamericana
aplaude gritando:
USA, USA, USA! ¡NUMBER ONE!
Llega el africano, una mole de
ébano y músculo, macizo como una roca. Le arrancan la camiseta y le empiezan a
dar más latigazos que a Kunta Kinte en la serie Raíces. A la hora y media el africano dice: 'n'gambo, n'gambo' (no más, no más).
La afición africana comienza a
gritar:
BLACK POWER, BLACK POWER! ¡FREE
AFRICA!
Sube el cubano (pinareño),
delgado, casi anémico. Le arrancan la camiseta y le empiezan a dar más
latigazos que a un esclavo egipcio en la película de Ben-Hur.
Pasa una hora, dos horas... a
la quinta hora, el verdugo dice: 'ya no puedo más, el cubano es el ganador!'
La afición cubana se alborota,
salta de regocijo y empieza a gritar:
A LA BI , A LA BAO , A LA BIM , BOM, BAO!
EL MUDO, EL MUDO, RA, RA, RA
A LA BI , A LA BAO , A LA BIM , BOM, BAO!
EL MUDO, EL MUDO, RA, RA, RA