Un hombre va a ver al dentista pues el dolor en una muela lo martirizaba.
Espera pacientemente su turno mientras la enfermera le tomaba sus datos.
Al fín, luego de 15 eternos minutos le toca su turno.
Empieza a explicarle al dentista cuál era la muela que le dolía cuando el dentista lo interrumpe:
- Perdone señor, ¿Es usted casado?
- Si, ¿Porqué?
- ¿Usted tuvo sexo con su esposa anter de venir a la consulta?
- ¡Si, efectivamente!
- ¿Y además hicieron un 69 verdad?
- Oh, entiendo, ¿Mi aliento huele a vagina?
- No, ¡Su frente huele a culo!