Baja el esposo a desayunar y encuentra a su esposa preparando el desayuno tradicional, huevos pasados, tostadas y jugo de naranja...ella vestía un camisón negro cortito.
Al acercarse, ella se voltea y le dice coquetamente:
Al acercarse, ella se voltea y le dice coquetamente:
- ¡Hazme el amor ahorita mismo!
- Al esposo le saltaron los ojos mientras pensaba "caray este es mi día de suerte o estoy soñando"
Y sin perder un momento la abrazó, la subió a la mesa de la cocina y le hizo el amor como nunca lo había hecho...
Al terminar ella le agradeció y regresó a continuar preparando el desayuno..aún tenía el camisón enrollado al cuello.
El esposo sorprendido preguntó
- Y...¿A qué se debió esto?
- ¡¡Nada, que el reloj de tres minutos para los huevos se descompuso!!