Ambos trabajaban duramente para mantener el negociom que crecia permanentemente.
Un buen dia el esposo fallecio y por supuesto aparte del dolor por la irreparable perdida la viuda se veia en apuros para manejar el rancho sin ayuda.
Decidio entonces buscar un empleado que se ocupara de las faenas mas duras como el cuidado de los caballos y del ganado.
Despues de muchas entrevistas a decenas de candidatos quedaron dos finalistas:
Un experto jinete, alto y fornido pero tambien muy conocido como adicto a las drogas y otro con menos experiencia pero conocido por ser homosexual (marica).
Despues de pensarlo mucho la viuda decicio emplear al marica pues representaba menos riesgo para ella.
A los tres meses el rancho florecia nuevamente, el empleado se entregaba a sus tareas con esmero trabajando duramente de de sol a sol.
El viernes la viuda lo llama y le dice:
- Mira Isidoro, ya llevas tres meses aqui y has demostrado ser un trabajador muy eficiente, toma $ 500 y anda al pueblo a divertirte, tu lo mereces.
Isidoro se fue al pueblo y regreso a las 5 de la manana al rancho, se sorprendio al ver que la viuda lo esperaba en la sala, con una copa de vino.
- Isidoro, ven aqui, dijo la viuda.
- Si senora, en que puedo servirla
- Ven mas cerca por favor
- Si senora
- Desabrocha mi blusa..
- Si senora
- Ahora mi sosten...
- Si senora
- Ahora mi falda...
- Si senora
- Mis botas..
- Si senora
- Mi calzon
- Si senora
- Ya te he dicho mil veces maricon de mierda que no te pongas mi ropa carajo!